TODO CAE POR SU PROPIO PESO

¿Recuerdas a esa persona que te causó daño sin razón aparente?

¿A esa persona que no pudo verte brillar porque la carcomió la envidia?

¿A quién te hizo un mal y anda como si no haya hecho nada?

¿Qué quizo copiarte y tomar un lugar que no le correspondía? 

¿Que envenenó con mentiras a los demás para que también te odiarán?

¿Qué inventó cosas que nunca hiciste y dijo cosas que nunca dijiste?…

A esa persona en vez de odiarla tenle compasión, ¿Sabes por qué? Porque esa persona aunque se ve normal por fuera, realmente se está pudriendo por dentro…

Parece una locura pero es verdad,  estas personas cargan traumas, odios y rencores que los carcomen y pudren por dentro, causándose una profunda infelicidad…

Están en la oscuridad y tan llenos de podredumbre por dentro que odian a quienes son felices, prósperos y brillan con luz propia…

Por tanto la felicidad de estas personas es sólo pasajera, y al final todo aquello que desearon a otros lo viven en sus propias vidas, por la ley de reciprocidad, y vaya que así es…

No permitas que tu brillo se apague con las habladurías, ni que tu corazón se ponga triste por la envidia ni la maldad de la gente, porque la felicidad y la prosperidad no vienen de esas personas, vienen del Universo que te cuida y te bendice cuando vives en amor…  

Siempre recuerda que lo que sale de ti, regresa a ti multiplicado. Deseo de corazón, que todo lo que me deseas te regrese en forma de abundantes bendiciones…