Revives la misma sensación de no valía, soledad, rechazo, vergüenza…

Nuestro niño interior forma nuestro sistema de creencias básico y hay experiencias que aprendimos en base a carencias y que hoy debemos transmutar…

Nuestro cuerpo emocional busca terminar su proceso de maduración y para eso es necesario darle espacio a las necesidades al revivir cosas de la infancia con tu pareja, como la sensación de no valía, soledad, rechazo, vergüenza…

Hoy elige cerrar ciclos, sanar, llorar lo que se quedó no expresado para hacer crecer a tu adulto, al hacerte cargo de tu yo vulnerable…

Enséñate a ser una buena madre-padre pero de ti mismo aprendiendo a amarte desde el corazón para recuperar tu poder y autoafirmación…

Responsabilízate de tus necesidades, sin culpar ni buscar padres-madres en tus parejas y dejar de una ves el rol de “víctima”, que te hará revivir en el dolor por años…

Observar en que situaciones del presente se dispara el niño con su emoción adictiva de enojo, tristeza o miedo, para tener un diálogo contigo mismo, hablándole a tu yo herido y tocando su dolor desde el amor…

Y deja de recrearle lo que tanto le dolió en la infancia, preguntándote ¿Qué necesitó? Y aprende a dártelo…