Nadie tiene el poder de hacerte daño, excepto tú…

Dejemos de convertir en villanos a aquellos que decidieron no amarnos, el hecho de que no fueran capaces de encontrar nuestra belleza, no los hace malos…

Dejemos de utilizar a la gente para lastimarnos, ellos son libres de actuar como les plazca, pero uno es responsable de cómo utilizar lo que nos hacen…

Debemos ser libres de actuar, sin temor a herir susceptibilidades, y ser capaces de perdonar y entender que todos estamos aquí en un constante aprendizaje…

La gente se va a equivocar porque es su naturaleza, nos va a mentir, nos va a fallar, nos va a ignorar, y eso no sólo está bien, sino que es necesario; porque desarrollará nuestra sensibilidad, potenciará nuestras capacidades, despertará nuestros sueños, ahuyentará nuestros miedos…

Dejémoslos que pasen por nuestra vida, dejemos que sean, que se muestren o se escondan, que nos griten, que tiren la puerta al partir, dejemos que nos mientan, que nos culpen, que jueguen con uno, que finjan por interés, que pretendan mostrarnos lo que no son…

Aprendamos a observarlos, estudiarlos, descubrirlos, amarlos, perdónalos y dejar que sigan fluyendo en este río inmenso de seres que van y vienen por nuestra vida…

No señalemos, no juzguemos, AMEMOS y sigamos adelante…

No nos aferramos a nada ni a nadie, aprendamos a soltar, a disfrutar el momento en el que coincidan en nuestro espacio y en nuestro tiempo, no esperemos que sean buenos, no esperemos que sean sabios, no esperemos que sean rectos, NO ESPEREMOS!!!

Tomemos lo bueno, dejemos que todo tome su lugar, dejemos también que todo se hunda, al final lo que flote, es lo que debe flotar…

Lo que está en este Universo para ser nuestro llegará sin que lo perdamos, se quedará sin que lo forcemos, será a su tiempo y a su hora, y siempre será perfecto porque el poder está en ti…